El hipofraccionamiento en el tratamiento del cáncer de mama
El tratamiento del cáncer de mama está en constante evolución a medida que los expertos persiguen mejores resultados de calidad de vida y mayores tasas de supervivencia para las pacientes.
Durante las últimas tres décadas, la tasa de supervivencia del cáncer de mama ha aumentado en todo el mundo.1 Esto se debe en parte a los avances en las diferentes opciones de tratamiento para pacientes en distintas etapas de la enfermedad.
Un avance en particular es la aplicación de radioterapia después de la cirugía2. Se ha demostrado que este enfoque es beneficioso en pacientes con cáncer de mama en algunas pacientes que se han sometido a una mastectomía, en todas las pacientes tras una cirugía conservadora de la mama y en aquellas con cáncer diseminado a los ganglios linfáticos cercanos.2,3
Originalmente, este programa de radioterapia consistía en dividir la dosis total de radiación prescrita en 25 dosis más pequeñas, conocidas como fracciones, que se administraban en múltiples sesiones diarias durante la semana, y duraba al menos cinco semanas.2
Sin embargo, investigaciones más recientes han puesto de manifiesto la ventaja de reducir el número de sesiones aplicando dosis de radiación ligeramente más altas en cada sesión, un concepto conocido como hipofraccionamiento.
¿Qué es el hipofraccionamiento?
El hipofraccionamiento es la práctica de dividir una dosis total en un número menor de fracciones, pero con dosis más altas en cada fracción.2 Estos tratamientos pueden administrarse una vez al día y durante un período de tiempo total más corto que la radioterapia convencional.4
Múltiples estudios, incluido uno en el que se ha hecho un seguimiento a pacientes con cáncer de mama durante los 10 años posteriores al tratamiento, confirman que la radioterapia hipofraccionada puede ser tan segura y eficaz como la radioterapia convencional utilizada en la misma situación.2,5
Estos estudios han demostrado que las pacientes que reciben radioterapia hipofraccionada no presentan diferencias significativas respecto a las que reciben radioterapia convencional respecto a:
- Supervivencia global.3 Se refiere a las posibilidades de que la paciente se mantenga con vida después de un cierto número de años desde el inicio del tratamiento.
- Supervivencia libre de enfermedad.3 Como sugiere el nombre, la supervivencia libre de enfermedad se refiere a una medida de tiempo, una vez finalizado el tratamiento, durante el que la paciente permanece libre de signos o síntomas de la enfermedad original.
- Control local del cáncer.3 El hipofraccionamiento es tan efectivo como la radioterapia convencional en la prevención de la reaparición del cáncer en el mismo seno donde se originó.
- Efectos secundarios relacionados con el tratamiento.3 Tanto la radioterapia convencional como la hipofraccionada tienen el potencial de provocar efectos adversos como los que afectan la piel, los pulmones o el corazón. Sin embargo, a pesar de la aplicación de dosis más altas por sesión, no se ha demostrado que el hipofraccionamiento suponga un incremento de la probabilidad de aparición de estos efectos secundarios en un grado significativo.
- Alteración de la apariencia de los senos.5 La apariencia de los senos tras someterse a radioterapia es de particular importancia para muchas mujeres. Un ensayo de 10 años demostró que un programa experimental de terapia hipofraccionada no produjo diferencias significativas en la apariencia visible de los senos en comparación con la radioterapia convencional.5
Las ventajas del hipofraccionamiento
Por su naturaleza, la radioterapia hipofraccionada ofrece algunas ventajas sobre la radioterapia convencional. Entre otras:
- Mayor comodidad, ya que las pacientes necesitan asistir a menos sesiones. Esto disminuye el tiempo de permanencia en la clínica y los desplazamientos, algo especialmente importante para las pacientes con edad avanzada y las que viven a cierta distancia de la unidad de tratamiento.
- Mejora de la accesibilidad a la radioterapia. Como un programa de radioterapia con hipofraccionamiento requiere menos sesiones, los proveedores de atención médica pueden atender con más rapidez a la siguiente paciente en espera.3
El esquema estándar de radioterapia hipofraccionada moderada tras la cirugía de mama,6 consiste en administrar de 15 a 16 fracciones, que son menos que en la terapia convencional pero más que las fracciones exploradas en estudios recientes.
Actualmente y a la espera de confirmar los mismos resultados a largo plazo, está aceptado realizar un esquema todavía más corto que llamamos ultra-hipofraccionamiento, que consiste en reducir el número de sesiones a 5, con lo que el tratamiento dura 1 semana. Las investigaciones apuntan a que este esquema tiene el mismo control local y los mismos efectos adversos que el de 15 fracciones, con un seguimiento de casi 10 años.
Referencias
- Shangbo X. et al. Frontiers in Oncology 2021. Disponible en: https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fonc.2021.689562/full Último acceso el 14 de junio de 2022.
- Brunt AM. et al. Lancet (London, England).2020; 395(10237): 1613-1626. Dispinible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7262592/ Último acceso el 14 de junio de 2022.
- Liu, L. et al. Radiat Oncol. 2020; 15:17. Disponible en: https://ro-journal.biomedcentral.com/articles/10.1186/s13014-020-1463-1 Último acceso el 14 de junio de 2022.
- The British Institute of Radiology. Hypofractionated Radiotherapy. 2017. Disponible en: https://www.bir.org.uk/media-centre/position-statements-and-responses/hypofractionated-radiotherapy/ Último acceso el 14 de junio de 2022.
- Brunt AM. et al. J Clin Oncol. 2020 Oct 1; 38(28): 3261-3272. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7526720/ Último acceso el 14 de junio de 2022.
- Krug D. et al. Strahlenther Onkol. 2021; 197(4): 269-280. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7841378/ Último acceso el 14 de junio de 2022.