Tratamientos

Estamos contigo
En GenesisCare desde el primer momento en que nos contactas vamos a estar a tu lado. No sólo nos centramos en el tratamiento del cáncer, primero está la persona. Tu eres la razón por la que estamos aquí. Estamos a tu disposición ante cualquier duda que te pueda surgir.

Hablar ayuda
En ocasiones, hablar con un profesional puede ser de gran ayuda para ofrecerte una perspectiva del tratamiento desde fuera. Contamos con un equipo de psicooncólogos capacitados para ayudarte. Te podrán ayudar tanto con problemas personales como acerca del tratamiento.

Hablar con personas que han pasado por lo mismo
A veces, hablar con alguien que ha pasado por lo mismo y lo ha superado o alguien que se encuentre con tu mismo tratamiento puede servir de ayuda.

Resolver asuntos prácticos
Si necesitas ayuda con el transporte o el alojamiento, podemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para facilitártelo al máximo.

Este es el comienzo de tu tratamiento y experiencia como paciente. Cualquier consulta o duda que tengas, háznosla saber.

Antes de la cita

• Entendemos que estés preocupado, por lo que puedes visitarnos antes de comenzar el tratamiento si lo necesitas.
• También tienes la posibilidad de venir a conocer al equipo que te atenderá durante el tratamiento y preguntarles cualquier duda.

• Habla con nosotros, pregúntanos y conoce un poco más sobre el tratamiento.
• Si lo deseas, puedes venir con un amigo o familiar.
• Si te quedas con alguna duda no dudes en volver a contactarnos.

Un especialista revisará tu historial médico y comentará las pruebas que te haya realizado, rayos x, escáneres u otras pruebas esenciales para preparar tu tratamiento.

También tratarán:

• La duración del tratamiento.
• Los objetivos del tratamiento.
• Cualquier efecto secundario que puedas experimentar.
• Cualquier prueba o tratamiento adicional que puedas necesitar.

Tu vida no se detiene durante el tratamiento. Lo entendemos. Trabajaremos contigo para ofrecerte citas que encajen con el resto de tus actividades.

En absoluto. La radioterapia es indolora, de hecho, el tratamiento en sí no se ni se siente. La mayoría de las personas continúa con su rutina diaria habitual durante el ciclo de tratamiento.

Aunque la radioterapia se puede usar como único tratamiento para controlar el cáncer, a menudo es más efectiva cuando se combina con otros tratamientos.

Esto se debe a que diferentes tratamientos atacan al cáncer por diferentes vías. Por ejemplo:

La radioterapia de haz externo se puede aplicar antes de la cirugía, para reducir el tamaño del tumor facilitando su extracción, o, después de esta, para eliminar cualquier afección microscópica remanente.

Cuando la radioterapia se combina con quimioterapia, las células cancerosas pueden volverse más sensibles a la radiación. Esto hace que el tratamiento con radiación destruya las células cancerosas de forma más efectiva y mejore los resultados.

La combinación de estos tratamientos también trata el cuerpo en su totalidad, mientras que la radioterapia solo se enfoca en la zona del cáncer. Al tratar el cuerpo entero, la terapia ayuda a eliminar cualquier afección que pueda estar presente en otras partes del cuerpo.

La decisión sobre la metodología de tu tratamiento dependerá de tu enfermedad en particular y de tu estado de salud en general, y podrás tomar decisiones al respecto junto con tu equipo médico.

Tu oncólogo radioterápico te recomendará el tratamiento más adecuado para tratar tu enfermedad.

Los efectos secundarios durante el tratamiento existen y varían de una persona a otra. Lo más frecuente suele ser la aparición de cansancio y cambios en la piel. Te aconsejaremos como controlarlos y como cuidarte durante el proceso.